Últimamente me está gustando mucho la frase aquella tan famosa de: “más vale tarde que nunca”, a la que quiero añadir, …y “más vale hecho que perfecto”. Desde Mayo quiero sentarme y escribir este post… pero parece ser que no ha sido posible hasta hoy. Desde entonces han pasado un montón de cosas. A principios de ese mes de Mayo nos fuimos a EEUU en busca de nuevas aventuras relacionadas con el trabajo y tuvimos la grandiosa suerte de que el equipo al que íbamos a conocer superaba todas nuestras expectativas. Por fin le pudimos poner nombre al proyecto que había ido cociendo en nuestras cabezas y que poco a poco se iba haciendo realidad; Tech Talent South. Además de haber podido conocer a su gente, encantadora, cálida hasta el punto de abrirte la puerta de sus casas de par en par. Una experiencia, que por encima de cualquier resultado, nunca olvidaremos! La ilusión nadaba en nosotros, íbamos a traernos un pedacito de Charlotte a Málaga, junto con todo lo aprendido. Tras 6 días de inmersión e intensas charlas y reuniones, cuajamos una estrategia y salimos rumbo al sur, a desconectar y celebrarlo.
Durante el fin de semana, decidimos perdernos por Charlestón, donde comimos uno de los mejores helados del lugar, Olivia se lo pasó súper bien entre todas esas playas y parques preciosos haciendo amigos paseando a su perrito de peluche y pudimos quedarmos varias noches en Seabrook Island… una isla privada, que encontramos buscando alojamiento por RBNB, aunque hemos de decir que casi por los pelos. Estaba casi todo reservado. Menudo sitio más bonito, que paz, que luz, que playas, pack completo… No nos bañamos, hacía fresquito, pero vimos delfines saludando por la costa y paseamos en bici por la playa. Y todo lo que no vimos… nos quedamos con la miel en los labios, porque lo que es cierto es que cuando viajas con cero idea de a dónde vas a ir, si es bonito o no y además reprimes de empaparte de otros blogs que hablen de las zonas que planeas visitar… la experiencia es totalmente distinta. Añade sorpresa al viaje que de otro modo nos estamos acostumbrando a perder.
Sergio fué valiente de querer llevarse a una embarazada en fase nauseabunda al viaje, pero lo cierto es que no me lo quería perder por nada del mundo. El aterrizaje fue lo único que me costó, tras perder mi dignidad echando por la borda toda esa riquisima comida que te dan en el vuelo… mm… pero gracias a eso, llegamos los últimos a la cola (y tan últimos que casi nos cierran la entrada al pais) para pasar inmigración, donde me esperaba el primer McDonald de Charlotte y sus mega coca-colas XXL que quitan mareos, nauseas y lo que tengas!! Fueron mi remedio durante todo el viaje. También tengo que decir que el pequeño ser que habita en mí, se portó de maravilla y todo fué muchísimo más fácil de lo que esperaba.
Tras la vuelta, nos fuimos de vacaciones con los abuelos una semana, para luego empezar a trabajar 100% en nuestro nuevo proyecto. (Ya os contaré del viaje ese, fué muy chulo, pero tengo el video pendiente desde entonces…).Y aquí estamos, ya en Septiembre, atacados de los nervios, ilusionados, bastante cansados y con un sube y baja de emociones, esperando abrir en un par de semanas… Todo sea dicho que el equipo que hemos encontrado en Málaga, más concretamente a nuestra súper persona, que está haciendo que todo sea mucho más fácil. Y sí, esa súper persona eres tú Susana, si me lees! 🙂
Os dejo el video de nuestro viaje, que espero que os guste!! Y aprovecho para deciros, que estoy preparando una sorpresa para todos aquellos que me habeis preguntado en todos estos meses sobre mis videos, que espero que os vaya a gustar un montón y más aún, espero que os vaya a ser súper útil y le saqueis todo el partido!
Os contaré más en breve.
Abrazos fuertes para todos y que Septiembre no se os haga muy cuesta arriba!!
Nessi.